El afamado director Francis Ford Coppola fué víctima de robo en su casa de Buenos Aires, Argentina. Aparte de equipo de filmación y computadoras, tenía un dispositivo para hacer respaldos de sus datos, que contenía 15 años de trabajo entre guiones, fotografías, escritos y el guión de su próxima película (que por fortuna tenían también otras personas). Esto constituye un nuevo llamado de atención sobre algo en extremo peligroso: la seguridad de la información.