Hasta hace poco, yo siempre me había declarado como moderado cuando se tocaban temas relacionados con la metafísica, pero en el fondo, no podía evitar sentirme mal por ello. Siempre he tratado de ser congruente, y eso requiere de un gran esfuerzo cuando se interactúa con otros, sobre todo en un mundo de incongruentes. Hoy dejo una gran incongruencia atrás, y es la de seguir pretendiendo, sobre todo con los demás, que soy moderado respecto a cuestiones metafísicas, y me declaro militante en contra de cualquier cuestión metafísica.